Vimos a Kapri a lo lejos. Su pelaje blanco, negro y fuego resaltaba en la distancia como un rayo de luz. Todos sabeis que es excepcional cruzarse con un GBS y nosotros no habiamos vivido todavia la experiencia de encontrarnos uno casualmente. Entendereis pues nuestra sorpresa cuando avistamos a Kapri. Pero lo mas extraordinario es que a pesar de la distancia y del tiempo reconocimos a una de las nuestras.....Hija de Kenya y Kongo, marcho de casa con cuatro meses y no la habiamos reencontrado a pesar de ser amigos de su nueva familia. Bien, el caso es que Kapri esta preciosa, divina...una perra zen, totalmente relajada, amable, paciente y fuerte..en fin una gozada...
Nos fuimos a casa muy felices y aun me puse mas contenta cuando Julieta me llamo para decirme de que los niños le habian dado nuestros recuerdos y que es muy feliz con Kapri, (Diana). De eso se trata pues...
