martes, 19 de junio de 2012

TIME NOT FORGIVE



Demasiados dias sin escribir y muchas historias que contar. Asi podria resumir lo que me pasa por la cabeza cuando pretendo contar como estan las cosas por aqui.. Kenya y Kongo llevan una vida placida y feliz, sin demasiados altibajos.  Su rutina y su  habitos se mantienen inalterables...van y vienen, se levantan y se acuestan, ahora a la sombra...ahora al sol...me siguen en comitiva, me miran, me vigilan,, me esperan, me cuestionan...se comunican entre ellos. Me reconforta su compañia en estos dias tan revueltos, donde todo parece desmoronarse.
Ajenos a este caos global Kenya y Kongo sueñan dichosos al lado de la cocina, esperando su racion de medianoche.
Kenya empieza a estar viejita. Ya tiene ocho años y aunque me cuesta decirlo, le veo en la mirada ese brillo que se apaga..Con todo sigue teniendo la chispa y la elegancia de siempre, pero el tiempo no pasa en vano, por mucho que yo insista en pensar que mi Kenya es inmortal...